¿Alguna vez ha encontrado manchas moradas en alguna parte de su cuerpo? Si es así, podría tratarse de equimosis. Equimosis es el término médico utilizado para el tipo más común de hematomas. Estas manchas de color púrpura oscuro se forman en la piel cuando la sangre se filtra de los vasos sanguíneos a las capas de la piel. Por lo general, esta condición ocurre debido a una lesión, como una colisión, un golpe, una colisión o una caída.
Causas de la equimosis
La equimosis es más común en los brazos y las piernas porque es más probable que estas áreas se vean afectadas. Si su brazo o pierna golpea una superficie dura, se puede formar un hematoma. Esto puede causar la destrucción de los vasos sanguíneos que se encuentran justo debajo de la superficie de la piel. Cuando la sangre no sale a la superficie de la piel, la sangre queda atrapada debajo de la piel. Las células sanguíneas llamadas plaquetas también se combinan con proteínas (factores de coagulación) para formar un coágulo. Estos coágulos pueden bloquear los vasos sanguíneos dañados y detener el sangrado, provocando hematomas. Además, la equimosis también puede ocurrir cuando se lesionan los huesos, especialmente en las muñecas o los pies. Sin embargo, si a menudo encuentra equimosis en su cuerpo, pero no puede recordar cuándo se lesionó, entonces existen otras posibles causas subyacentes. Los problemas con las plaquetas, los factores de coagulación de la sangre o los vasos sanguíneos pueden causar equimosis. Los hematomas incluso pueden indicar un trastorno hemorrágico grave, como hemofilia o enfermedad de von Willebrand. Varias otras afecciones pueden causar equimosis, que incluyen enfermedad hepática o renal, problemas de la médula ósea, enfermedad del tejido conectivo, cáncer, VIH u otras infecciones. Mientras tanto, esta afección también puede desencadenarse por la falta de vitamina B12, C o K. Ciertos medicamentos también se asocian a menudo con una mayor probabilidad de sangrado y hematomas, como:
- Medicamentos anticoagulantes, como warfarina o aspirina
- Antibióticos
- Corticoesteroides
- Suplementos dietéticos, por ejemplo, ginkgo biloba.
Los padres tienden a tener moretones con facilidad porque con la edad, la piel comienza a adelgazarse y pierde su capa protectora de grasa. Además, los ancianos también pierden colágeno y elastina, lo que fortalece los vasos sanguíneos, por lo que es más probable que experimenten hematomas. [[Artículo relacionado]]
Los síntomas de la equimosis
El síntoma principal de la equimosis es una decoloración púrpura, negra o azul de la piel de más de 1 cm. Esta zona también es sensible y dolorosa al tacto. La equimosis desaparece cuando el cuerpo reabsorbe la sangre que se ha acumulado debajo de la piel. El desarrollo de la desaparición de la equimosis, a saber:
- Rojo o morado (primera etapa)
- Negro o azul (segunda etapa)
- Chocolate (tercera etapa)
- Amarillo verdoso (cuarta etapa)
- Volver a la piel normal.
Si la equimosis no se debe a una lesión, sino a un trastorno hemorrágico, los hematomas pueden ir acompañados de otros síntomas, como hemorragias nasales frecuentes, períodos prolongados o abundantes y dificultad para detener el sangrado. Además de la equimosis, existen otros dos tipos de sangrado debajo de la piel que pueden ocurrir. Estas hemorragias son de diferentes tamaños a las equimosis, por lo que le resultará más fácil diferenciarlas. Aquí hay otros tipos de sangrado debajo de la piel:
La púrpura son manchas o parches de color púrpura oscuro de entre 4 y 10 mm de diámetro. Este tipo de sangrado tiende a ser más definido que la equimosis y, a veces, se parece más a una erupción que a un hematoma. A diferencia de la equimosis, la púrpura tampoco es causada por una lesión. Esta afección generalmente es causada por una infección, medicamentos o problemas de coagulación de la sangre.
Las petequias son manchas muy pequeñas de color púrpura, rojo o marrón en la piel. Este sangrado es causado por la rotura de capilares que son pequeños vasos sanguíneos. Las petequias ocurren en grupos y se parecen más a una erupción. Esta afección suele ser el resultado de un tratamiento o una afección subyacente, como manchas rojas en pacientes con dengue hemorrágico.
Cómo deshacerse de la equimosis
En general, la equimosis se cura por sí sola en 2-3 semanas. Las lesiones que causan hematomas pueden tardar más en sanar, especialmente si hay una fractura. Sin embargo, hay varias cosas que puede hacer para acelerar el proceso de curación, a saber:
- Coloque una bolsa de hielo en el área afectada durante las primeras 24 a 48 horas después de la lesión.
- Descansar la zona del cuerpo afectada por la equimosis.
- Eleve la extremidad lesionada por encima del corazón para evitar una hinchazón dolorosa
- Usar bolsa de calor varias veces al día dentro de las 48 horas posteriores a la lesión
- Tome medicamentos antiinflamatorios no esteroides, como ibuprofeno, para reducir la hinchazón dolorosa.
La aparición de uno o dos hematomas en el brazo o la pierna no suele ser una afección grave. Sin embargo, si aparecen muchos hematomas o aparecen en el estómago, la espalda o la cara sin motivo aparente, debe consultar a un médico. El médico hará un diagnóstico y determinará el tratamiento adecuado para tratar su afección. [[Artículo relacionado]]